Descripción

Sé testigo de las vastas montañas y los amplios espacios abiertos de las Tierras Altas escocesas en un recorrido por algunos de sus lugares más especiales. Contempla castillos que se desmoronan dramáticamente contra escarpadas colinas, y disfruta de apacibles vistas de lagos cristalinos enclavados entre picos y cañadas. Conoce la rica historia y el folclore de la zona, y contempla algunos de los paisajes más célebres de Escocia.

Nuestra primera parada será en la Granja Craigies, donde tendrás la oportunidad de ver de cerca a los hermosos "Highland Coos". Llévate zanahorias, ¡les encantan los tentempiés! También hay una tienda en la granja que vende productos locales, donde podrás aprovisionarte de algunos aperitivos y recuerdos.

A continuación nos dirigiremos hacia el oeste, hacia el hermoso pueblo de Luss, situado a orillas del lago Lomond. Una vez allí, dispondrás de 30 minutos para explorar este maravilloso y pintoresco pueblo, votado por algunos como "el pueblo más bonito de Escocia".

Aproximadamente a una hora se encuentra el impresionante castillo de Inveraray. El paso de montaña "The rest and be Thankful" está en ruta, y nos detendremos aquí para hacer unas fotos rápidas del fantástico paisaje. Parada fotográfica de 10 minutos.

El emblemático Castillo de Inveraray, hogar y residencia del "Duque y la Duquesa de Argyle", (el Duque de Argyle ostenta el título de Jefe del Clan Campbell) abierto al público y con una cafetería en el sótano.

Nuestra siguiente parada es el castillo de Kilchurn, una gran parada para hacer fotos, fue una formidable fortaleza en su época, rodeada por tres lados por agua. Parada fotográfica de 10 minutos

A continuación nos dirigiremos al lugar más fotografiado de Escocia: Las Tres Hermanas de Glencoe. Se trata de un mirador de montaña increíblemente bello, lleno de patetismo y relevancia histórica.

Desde aquí, regresaremos a través de Rannoch Moor, la mayor extensión de turberas del Reino Unido. Hay varias oportunidades de hacer paradas fotográficas por el camino.

Desde aquí, volvemos a casa, pero para interrumpir el viaje nos detendremos en los Kelpies, las estatuas equinas más grandes del mundo.

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